jueves, 22 de abril de 2010

Moccia ha llegado a Sevilla



No hay barreras para colgar candados.
En todo el mundo hay historias a las que echar la llave para que no se pierdan nunca.
Y Sevilla ya forma parte de ellas.


2 comentarios:

MeiK dijo...

cualquier lugar es bueno para anunciar el amor de dos personas, incluso las barandas de las escaleras de la facultad XD
bonitas fotos nena :)

yo tambien pienso colgar el mio!!

Sara sin aditivos dijo...

Al finial siguió adelante la prohibición?